¿Cómo disfrutar con sus hierros?
Creo que nunca he jugado el mismo golpe de hierro dos veces, ni en la cancha de prácticas. Cada golpe tiene algo nuevo –un ligero cambio en el lie, la dirección del viento o cómo se siente sobre la bola. Soy alemán pero no soy tan técnico como podría pensar. Soy un jugador de sensaciones. Jugaré un draw o un fade, variaré el efecto, le pegaré por alto o por bajo. Suelo hacer el golpe que “me llega” en cada momento.
Un buen ejemplo se produjo durante la tercera ronda del U.S. Open del año pasado. En el hoyo 5, un par 5, mandé mi drive a una de las zonas de arena de Pinehurst. Tenía una pendiente cuesta abajo, estaba a algo menos de 200 metros de Green y tenía posibilidades de alcanzarlo. Podría haber jugado de muchas maneras pero opté por hacer un golpe bajo y que rodara.
Cogí un hierro 7 y jugué la bola un poco retrasada en mi stance. Le pegué fuerte y vi como la bola aterrizó unos 10 metros corta y botó un par de metros más. Luego conseguí embocar y firmé un eagle, y al día siguiente gané mi segundo grande.
Para ser un jugador de sensaciones usted debe conocer algunos conceptos básicos del swing pero también tiene que añadir cierto instinto personal.
Le voy a contar algunas sensaciones con las que juego. Úselas para mejorar sus fundamentos y, finalmente, desarrolle las suyas propias.
EN LO ALTO : BRAZOS JUNTOS, GIRO AMPLIO
▶ Yo comparo el inicio del swing con el uso de un ordenador. Si introduce unos datos erróneos, el resultado no será bueno. Del mismo modo, si usted “programa” el backswing con un buen ritmo, una buena mecánica y una adecuada secuencia de movimiento, podrá “configurar” un poderoso downswing.
Cuando llevo el palo hacia atrás, me gusta mantener mis antebrazos muy juntos. Cuando siento mis brazos unidos, todo, de la cintura para arriba, se mueve en sincronía. Mi otro pensamiento en el backswing es girar mis hombros totalmente asegurándome de que mis brazos y manos van con ellos.
Evite hacer el swing sólo con los brazos, como veo que hacen muchos jugadores amateur. Un movimiento coordinado con los brazos y los hombros hacia atrás involucrará a sus caderas y a la parte central e inferior de su cuerpo. En ese momento estará preparado para ir a por la bola.
EJERCICIO
▶ En el circuito, sabemos hasta dónde llegamos con cada uno de nuestros hierros. Usted también debería saberlo. Coja un medidor de distancia, vaya a su cancha de prácticas y elija un objetivo que le permita obtener una buena lectura de la distancia del vuelo de la bola. Usted elegirá mejor los palos y hará el swing con más confianza.
EN EL FINISH : PEGUE ABAJO Y A TRAVÉS
▶ Lo más importante del juego de hierros es golpear a la bola hacia abajo. Cuánto tiene que golpear hacia abajo dependerá del hierro que esté usando y de la cantidad de efecto que quiere aplicar. Y la clave está en hacerlo de forma natural, dejando que la bola esté en el camino de la cabeza del palo cuando ésta hace su arco natural.
Hay una zona unos 25 cm antes del impacto y a otros 25 cm después, donde se desarrolla todo lo que hizo anteriormente en el swing y donde se determina el impacto. Lo que ocurre en esa zona sucede tan rápido que no se pueden hacer ajustes. Mi clave para llevar el swing a través de la bola es: “Mantener el estómago hacia abajo”.
Es más una sensación que un reflejo literal de lo que sucede. Usted quiere girar las caderas y la parte central de su cuerpo a través de la bola, sin deslizarse y sin inclinarse; y no quiere que las caderas se alejen del objetivo. Gire a través y conseguirá hacer un finish bueno y equilibrado.
EJERCICIO
▶ Cuando caliento antes de una ronda, practico el golpeo de hooks y slices de forma deliberada para saber qué tipo de golpe siento mejor ese día. Algunos días tengo una preferencia de golpe clara y no quiero estar luchando contra mis instintos en el campo. Caliente con un propósito.
Fuente: Golfdigest por Martín Kaymer - Feb 2016
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